El filósofo griego ,y discípulo de Sócrates, Platón sostuvo una concepción de la
sociedad y el mundo muy particular. El pensamiento platónico se basa en la búsqueda
de lo fijo, de lo permanente. Para Platón,
la realidad es una verdad universal y eterna mientras que lo efímero y aparente son meras
ilusiones. La cosmología platónica plantea el mundo como un sistema dual jerárquico
donde existe un nivel superior y un nivel inferior dentro de un orden
estable. Su teoría política y su metafísica se entrecruzan ,y resulta difícil
exponerlas por separado debido que Platón consideraba que la sociedad y el
cosmos se regían según las mismas reglas.
Platón nació en Atenas en los tiempos de Pericles. Después de la guerra con
los persas, Atenas se convirtió en una potencia cultural, política
y militar que, hasta el día de hoy, a pesar de los siglos, no deja de causar la
admiración y el asombro de todos. Sin embargo, este periodo de esplendor termino trágicamente en la guerra donde la
poderosa Esparta resulto victoriosa. Platón,
y su pupilo Aristóteles, responsabilizaron al sistema democrático ateniense por
la derrota. Por eso es que para entender a Platón, y a los filósofos
posteriores, es necesario saber algo de Esparta.
La visión platónica, tan del universo como de la sociedad, presenta una clara influencia del modelo totalitario y rígido espartano. Los griegos admiraban la ciudad espartana
por su gran estabilidad. Esparta era un
estado oligárquico y militarista que se caracterizaba por su poca libertad
personal y la severidad de sus leyes. En Esparta, había orden. Mientras que en los demás
ciudades de la región, las revoluciones
eran cosa común, la constitución espartana
permaneció sin cambios por siglos. Por otro lado, para Platón, y para su sucesor Aristóteles, la democracia representaba la perdida de la guerra, la destrucción y el
caos. A Platón, la democracia lo despojo
de sus riquezas familiares. Además, la democracia condeno a su querido Sócrates
a la muerte.
Platón y Aristóteles dominaron
casi exclusivamente el pensamiento
occidental a lo largo de la edad antigua, la media y la moderna. En las
religiones occidentales, como el judaísmo, el cristianismo y el islam, la influencia griega es tremenda, sobre todo
en el cristianismo, y especialmente en el
catolicismo. Basta con leer un poco a
San Agustín para notar una fuerte corriente neoplatónica. Solo basta con ojear
algunos escritos de Santo Tomas de
Aquino para reconocer claramente a Aristóteles.
La Iglesia Católica al día de hoy aun acepta la doctrina de Santo Tomas como su doctrina oficial. De hecho, la teología cristiana,
y la de las otras religiones abrahamicas, siguen
fielmente un orden muy semejante a un reinado de la antigüedad regido por los esquemas platónicos y aristotélicos.
Los grupos religiosos pretenden
ser las reveladores de la verdad absoluta convirtiendo en dogma las
ideas que exponen sus autoridades y su literatura. Un dogma es sistema de pensamiento creado por hombres del
pasado tan falibles como los hombres de hoy. Sin embargo, estos hombres de
mentalidad autoritaria pertenecieron a organizaciones muy poderosas con la capacidad
de imponer, con el apoyo de las fuerzas políticas, sus planteamientos como verdades
incuestionables a la población civil. Las
verdades se soportan con argumentos, no con el poder. Y siempre están sujetas a
refinación.
El concepto tradicional de Dios,
entre muchos otros conceptos religiosos tradicionales, se deben abrir al escrutinio
público, aboliendo estas ideas retrogradas que unen la verdad con la autoridad. Desde los tiempos de Sócrates, Platón y Aristóteles,
el pensamiento humano ha avanzado mucho, y los sistemas jerárquicos ya no son
tan idolatrados como antes.
Los
grandes temas de la vida no pueden enjaularse, deben liberase. Una mejor
compresión de la realidad depende de una mente abierta y sin fronteras. Por eso
es que el primer paso hacia el verdadero saber es: la duda.
Gustavo Godoy
Articulo publicado por el Diario El Tiempo de Valera , Viernes 05 de Febrero de 2016 en la columna Entre libros y montañas
Gustavo Godoy
No hay comentarios:
Publicar un comentario